BALONCESTO – El Óbila solicita al Comité de Competición que no le arbitren cuatro colegiados abulenses a los que acusa de amenazas

Captura de imagen de teléfono móvil aportada por el Óbila como prueba

Las diferencias entre el Óbila Club de Basket y el estamento arbitral de Ávila son cada día que pasa más profundas. Si recientemente la entidad baloncestística se quejaba de los árbitros por querer perjudicar al club, ya fuera en los partidos de la cantera o en los del primer equipo –en ambos casos dando la razón a los verderones el órgano de competición–, ahora se escribe un capítulo más en esta triste historia que tanto daño está haciendo al deporte abulense en general y al baloncesto en particular. A través de una carta al Comité Territorial de Competición el Óbila solicita que se impida “volver a arbitrar en ningún encuentro federado en el que participe nuestro club” a cuatro colegiados abulenses, a los que acusa de actuar “de forma conjunta y colectiva” con “amenazas recibidas y probadas”.

El Óbila, a través del escrito firmado por su directivo Eduardo Martín Fernández,  dirigido al Comité Territorial de Competición, recusa a los árbitros Francisco López Vázquez, Javier Herráez Velasco, Beatriz González y Alexandra Calvo, por la probabilidad de que “puedan cumplir sus amenazas ante nuestra entidad y todos sus componentes (directivos, entrenadores, delegados y jugadores)”. Y es que según declaración jurada del entrenador del equipo cadete autonómico masculino, Jorge Gutiérrez Cabrero, el viernes 9 de noviembre recibió en su teléfono móvil un mensaje de texto, procedente presuntamente del teléfono de uno de los colegiados citados, Francisco López Vázquez. La misiva contenía las siguientes expresiones: “Buenas anda usted vivo? Tus directivos quieren guerra, pues la van a tener. Yo este año no iba a pitar. Pero ahora sí, y estad quietos porque vais a pagar multas hasta que me canse yo”.

Este hecho viene a colmar el vaso de la paciencia del Óbila Club de Basket, quien manifiesta “que existe una gran preocupación y temor ante la escalada de acontecimientos que se están sucediendo últimamente en el comité provincial de árbitros de baloncesto de Ávila”, respecto a la actuación de los cuatro árbitros mencionados en relación con el Óbila.

En el último año y según el Óbila Club de Basket, “se han sucedido una serie de acontecimientos documentados y probados muy graves, que han sido denunciados y ante los cuales se ha solicitado constantemente amparo por este club y que dañan la imagen de nuestra ciudad, entidad y sus componentes, así como al baloncesto y al deporte en general, más aún si cabe al venir de aquellos que deben ser los encargados de aplicar las normas en los campos de juego”.

Entre ese cúmulo de acontecimientos en los que basa su petición de recusación arbitral, el club abulense de baloncesto relaciona los errores en las anotaciones de los encuentros de LEB Plata con el F.C. Barcelona y el ISB Azpeitia; el anuncio público de haber realizado grabaciones telefónicas al gerente de la Federación de Baloncesto de Castilla y León, con amenazas de difundir dichas grabaciones; la convocatoria pública de huelga; la acusación pública de mentir el informador arbitral autonómico; la acusación pública de dejación de funciones del formador arbitral autonómico; las acusaciones públicas sin prueba alguna hacia directivos y entrenadores del Óbila; y la anotación falsa y sin prueba alguna en un acta oficial de un encuentro federado de que las canchas de baloncesto del Carlos Sastre no cumplían las medidas reglamentarias.