Páginas

21 de mayo de 2015

CICLISMO – La edición más histórica del ciclismo clásico homenajeó a Julio Jiménez

Julio Jiménez
Heraldo de Soria / Con un intento fallido de foto de familia arrancaba a las 10.00 horas la cuarta edición de la marcha cicloturista ‘retro’, La Histórica de Abejar en una jornada calurosa. Una imagen que da el pistoletazo de salida a esta marcha clásica que transcurre con bicicletas de más de 25 años, y que este año no pudo retratarse debido a la gran cantidad de participantes, cerca de 300, que ataviados con sus complementos de antaño, hicieron esta edición más histórica que nunca.

Fue el homenajeado Julio Jiménez el que cortó el cordón de salida y una traca de petardos anunció la partida de un año más. Una cita cada año más histórica, donde se superó con creces el número de afluentes de la pasada campaña, y en la que la organización colgó hace varias semanas los carteles de ‘no hay dorsales’.

Así las bicicletas y los maillots clásicos invadieron la comarca durante los 60 kilómetros de recorrido, por pistas de asfalto y caminos de tierra, para rememorar la dureza y las gestas aquellos años. Y para transportarse a esa época la historia viva del ciclismo estuvo presente en esta edición con ex profesionales como Ángel Arroyo, Andreï Zintchenko, Serquei Smetanine, Chechu Rubiera, Hector Rondán, Alberto Benito, Enrique Aja o Javier Faricle.

Los primeros pasos del pelotón transcurrían por un extenso manto de pinos con destino a Cabrejas del Pinar, donde la dura pendiente de acceso al pueblo se convertía en el primer obstáculo para los ciclistas. Tras cruzar la localidad, un camino de tierra conducía al reguero de históricos hacia Muriel de la Fuente. Una pista sin asfaltar donde ponerse en su piel y recrear aquellas gestas. Tras un breve descanso, tocaba atravesar Muriel de la Fuente donde de nuevo el paisaje volvía a cambiar y el río Abión guiaba a los participantes por un camino de tierra hasta el escondido pueblo de Abioncillo.

Se acercaba el ecuador del recorrido, y un almuerzo en la localidad medieval de Calatañazor servía para reponer fuerzas tras el esfuerzo de ascender entres sus incomparables calles empedradas. Nada de complementos vitamínicos, productos sorianos y bota de vino para continuar el camino. El puerto de ascenso de nuevo hasta Cabrejas suponía otro duro repecho, antes de volver de nuevo a los descensos. El último tramo de regreso a Abejar dejó varios pinchazos, gajes del oficio.

Ya en el polideportivo, los participantes y sus acompañantes disfrutaron de una caldereta. Al finalizar, el Club Ciclista los Muros y su presidente y organizador de la marcha, Alberto Faricle, en colaboración con el alcalde de Abejar, entregaron un galardón a los ex ciclistas históricos que compartieron jornada en esta cuarta edición. Chechu Rubieras y Ángel Arroyo provocaron sonrisas entre el público al contar anécdotas de sus años como profesionales. El homenajeado Julio Jiménez ‘El Relojero de Ávila’ quiso agradecer el reconocimiento otorgado, elogió el ambiente y el entorno de la marcha y aseguró que en la próxima edición será un histórico más, ya que en la presente una reciente caída le ha impedido participar. Un reconocimiento merecido para el abulense cuando se cumplen 50 años de algunas de sus hazañas como proclamarse campeón de España de Montaña o vencer dos etapas del Tour y una de la Vuelta.

Además, como en anteriores ediciones, hubo un especial reconocimiento a los asistentes más veteranos, Tomás Amezaga y Alicia Hermosilla, ambos repetían galardón, así como a los más jóvenes, que fueron el participante local Carlos Arroyo y Jenny Blasco en féminas.

También hubo reparto de premios en forma de material ciclista entre los dorsales participantes. Todo ello animado por un incombustible y divertido Vitaly Lagutik, que acompañado de su acordeón amenizó la mañana con un amplio repertorio a la carta para todo los asistentes, llegados de todos los puntos de la península e incluso de fuera de ella.

Y es que La Histórica cada año va tomando más prestigio y popularidad, es por ello que la organización tuvo que fijar un límite de asistentes porque como ellos mismos reconocen, "si esto se masifica perderíamos nuestra esencia, y ya no sería La Histórica".

El motivo de que esta cita retro sea tan reputada, además de por el gran ambiente y del entorno, es porque se trata de una marcha no competitiva, para toda la familia, donde no hay cronos ni ganadores y donde además los acompañantes siguen y animan al pelotón en un autobús habilitado que va efectuando paradas en el recorrido.

No hay comentarios:

Publicar un comentario