NATACIÓN – Piden que se reduzca o elimine el cloro de las piscinas municipales

Su uso como desinfectante del agua crea problemas respiratorios, dermatológicos y oculares

Piscina cubierta del Complejo Deportivo Manuel Sánchez Granado

@deportesavila / Los responsables de varios clubes deportivos abulenses, más una docena de trabajadores y 150 firmas de usuarios de las piscinas municipales, han presentado un escrito en el Ayuntamiento de Ávila solicitando que se reduzca o elimine el uso de cloro en las piscinas y se busquen otras alternativas. La petición también la han enviado a todos los grupos políticos demandando su valoración y apoyo.

Según los firmantes de la solicitud, los efectos nocivos del cloro “han aumentado considerablemente afectando cada vez más a los usuarios, creando problemas respiratorios, dermatológicos, oculares, etc., pudiendo llegar a poner en riesgo su salud”.

«Que en la nueva piscina la depuración y el tratamiento del agua se realicen por medios eficaces y actuales»

El escrito está firmado por los clubes de natación Abulense, Ciudad de Ávila y Río Adaja, Triávila y el Cisne SOS. Además han apoyado y firmado la solicitud los jefes de los servicios de Pediatría y Dermatología del Complejo Asistencial de Ávila y los médicos especialistas componentes de estos servicios.

El objetivo de la demanda es lograr que en las piscinas se cree un ambiente sano y saludable y que en la futura piscina cubierta, pendiente de construir, se integren métodos coste-efectivos que mejoren considerablemente la calidad del agua con un grato beneficio de la salud. “Nosotros y generaciones venideras podremos disfrutar de un agua con garantías en la que poder practicar nuestro deporte favorito como un verdadero ‘Acto de Salud’", señalan.

En la construcción de la nueva piscina piden “que la depuración y tratamiento del agua se realicen por medios eficaces y actuales”. En este sentido indican “que se estudien por empresas especializadas del sector los mejores métodos de tratamiento del agua existentes en la actualidad con los que se consiga mejor calidad y menor coste de mantenimiento: cloración salina, luz ultravioleta, bromo, ozono, hidrólisis, electrólisis, etc.”.

Informe médico de apoyo

A la petición se acompaña un informe elaborado por el doctor Marco Antonio Budiño Sánchez, médico internista del Complejo Asistencial de Ávila, titulado “El cloro como desinfectante del agua de las piscinas cubiertas y su efecto sobre la salud”, que resume los principales artículos europeos y alguno americano sobre la relación del cloro con problemas de salud en personas que acuden a estas instalaciones.

«Síntomas respiratorios en trabajadores de piscinas y nadadores de élite»

El citado informe indica que “es conocida una elevada prevalencia de diversos síntomas respiratorios entre los trabajadores de piscinas y nadadores de élite, aunque el mecanismo patológico no está debidamente documentado, los productos de degradación del cloro aparecen siempre implicados con evidente fuerza de la asociación”.

“En nadadores adultos aficionados y niños, incluidos los asmáticos, los beneficios globales en la función respiratoria de la natación podrían superar a los perjuicios que conlleva la contaminación por cloro, siempre y cuando este último efecto adverso sea minimizando lo máximo posible”, señala el doctor Budiño, que advierte que el “riesgo de desarrollar problemas respiratorios es mayor en niños atópicos, asmáticos y en aquellos con alta frecuencia de asistencia a piscinas cubiertas cloradas”. Así se recoge en un estudio de una de las revistas más prestigiosas en el ámbito médico internacional y en estudios epidemiológicos realizados en Europa que “han conseguido demostrar que sí existe asociación entre la tasa de niños asmáticos y número de piscinas cloradas cubiertas por habitantes”.

«Hay métodos para sustituir al cloro»

“La cuestión ha adquirido tal importancia que la Academia Americana de Pediatría (AAP) ha desaconsejado específicamente la asistencia a piscinas cloradas de recién nacidos debido al potencial efecto tóxico sobre el aparato respiratorio”, añade el informe.

Para sustituir al cloro “existen en la actualidad prometedoras, efectivas y cada vez más utilizadas alternativas a la cloración del agua como método desinfectante, como por ejemplo son el ozono, luz ultravioleta, cobre/plata, bromo y peróxido de hidrógeno”, informa el doctor Budiño. Métodos que “podrían considerarse la solución a los problemas de salud que implican los productos de cloración del agua en las piscinas de uso municipal”.