Triunfo de Mayte Infante formando parte de un equipo mixto
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| Noel Martín y David García en lo más alto del podio |
@deportesavila / El concejal de Deportes del Ayuntamiento de Candeleda, David García Núñez, junto con el ciclista de El Arenal, Noel Martín Infante, lograron la primera plaza en la clasificación por equipos de dos de la Madrid-Lisboa Non Stop, una de las pruebas más duras del calendario de mountain bike.
Formando parte del equipo vallisoletano WRC Physios Carril Bici, Martín y García recorrieron los 770 kilómetros que hay entre las capitales de España y Portugal, teniendo un tiempo máximo de 55 horas. Lo realizaban en mucho menos, dado que registraron un crono de 36 horas, 8 minutos y 21 segundos, aventajando a los segundos clasificados, Marcos Plaza y Yeray Toquero (El Bicho), cerca de dos horas. El podio lo completaron Luis Miguel García y Javier Fernández (FTT Bike Madrid Team), casi con dos horas y media más que los abulenses.
Otra victoria en la carrera recayó en la arenala Mayte Infante Familiar, integrando el equipo mixto de WRC Physios Carril Bici, junto a los vallisoletanos Álvaro Alaguero Martín y Mario de Dios, con un tiempo de 35 horas, 42 minutos y 50 segundos. Lucharon por el triunfo hasta el final con el equipo Jamón Bike Gobik, que a priori tenía ventaja por estar formado por cuatro componentes.
En la octava etapa se produjo uno de los momentos estelares de la participación de la abulense Mayte Infante que se medía en el relevo con la campeona de España de Maratón en la categoría máster 30, Clara Pirla. Con gran mérito, la corredora de El Arenal no se despegó de su rival y la aguantó impidiendo que el equipo contrario le sacase tiempo.
Además, otro abulense, Jonatan López Perrino, compitió con otro equipo del WRC Physios Carril Bici, al lado de los vallisoletanos Manuel Ortiz y Víctor Quiñones, quienes terminaban en el puesto 46º de la general, con un tiempo de 39 horas, 54 minutos y 10 segundos.
Los participantes sólo disponían de un GPS para orientarse por el recorrido de la prueba, que carecía de indicaciones durante el itinerario, lo que dificultaba su gestión y la hacía más importante.
La prueba estaba dividida en etapas y al finalizar cada una de ellas los corredores podían darse el relevo con su compañero de equipo.
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| David García con la bandera de Candeleda |
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