Isabel Sanz / Transcurridas 17 jornadas del grupo VIII de Tercera División, quedan dos para acabar el año y comenzar la segunda vuelta del campeonato. Hasta ahora los dos equipos abulenses que militan en la categoría han realizado una magnífica actuación, con el Real Ávila metido en puestos de playoff -llegó a ser líder- y la Cebrereña, navegando en aguas tranquilas, clasificada en séptima posición.
Después del parón competicional de esta semana por la disputa de la primera fase de la Copa de Regiones UEFA por parte de la selección de Castilla y León, las dos últimas jornadas de la primera vuelta van a ser decisivas para que tanto Real Ávila como Cebrereña afronten la segunda parte de la liga en las mejores condiciones.
El Real Ávila tiene por delante dos compromisos verdaderamente difíciles. El primero será en casa el 17 de diciembre frente a La Virgen del Camino, un equipo situado en la duodécima plaza, que si bien en las últimas jornadas no ha obtenido resultados positivos, a domicilio ha ganado en los campos del Cristo Atlético, Becerril y Sporting Uxama, perdiendo por un solo gol de diferencia en el resto de sus desplazamientos.
Mucho más complicada será la despedida del año por parte de los encarnados. El rival será el todopoderoso líder Unionistas, que le espera en las Pistas del Helmántico con seis puntos de ventaja, aunque con tres derrotas en su contra por solo una el Real Ávila. El equipo de Salamanca no ha cedido ningún punto como local y ojalá sea el conjunto abulense el primero en conseguir arrancarle la victoria como ya lo hizo en la capital charra ante el Salmantino.
Por lo que respecta a la Cebrereña, rota por La Bañeza su buena racha de siete jornadas consecutivas sin perder, tiene a priori un partido fácil y otro difícil. El más sencillo es el que le enfrentará en Burgo de Osma al colista de la clasificación, Sporting Uxama, quien hasta el momento únicamente ha sido capaz de obtener un triunfo, precisamente en su última comparecencia en casa y con un equipo del potencial de la Arandina. En el resto de encuentros jugados en su feudo ha cedido un total de 18 puntos.
El choque difícil de los cebrereños es el que habrán de afrontar en el Helmántico donde le espera el Salmantino para cerrar el año. El segundo clasificado, tras sufrir su primera derrota en casa con el Real Ávila, ha cedido en sus prestaciones como local, empatando con el Bupolsa, perdiendo con el Cristo Atlético y ganando por la mínima a Unionistas. Sacar tajada en esta visita sería desde luego la mejor forma de celebrar el adiós a 2017.
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