NATACIÓN – La nueva piscina estará disponible cuatro años después de la clausura de la anterior

@deportesavila / Si se cumplen los plazos previstos por el concejal de Deportes del Ayuntamiento de Ávila, Pablo Luis Gómez, la nueva piscina cubierta estará disponible a mediados del año 2020, es decir, casi cuatro años después que se procediera a la clausura por riesgo de derribo de la anterior, situada en la Ciudad Deportiva, donde también se situará la que está previsto construirse aunque en una ubicación diferente, donde actualmente se encuentra el campo de tierra de fútbol 7.

El proyecto de la nueva instalación acuática ha sido presentado en el Palacio de Superunda por la empresa redactora que ganó el concurso de ideas, la UTE gallega formada por Jorge Barata Martínez-Iglesias y Veiga Arquitecto SLP, en presencia del alcalde de Ávila, José Luis Rivas, quien ha calificado la piscina como “moderna” y “con proyección de futuro”. Sin embargo, la longitud del vaso principal seguirá siendo como la antigua, ya derruida, de 25 metros, eso sí, contando con dos calles más para competición, pasando de seis a ocho, con una anchura de 16,6 metros. Contará también con un vaso de aprendizaje para ejercicios de rehabilitación y apto para niños, de 16,6 por 12 metros, con rampa de acceso.

A diferencia de la anterior, cuya estructura cubierta era metálica y que resultó afectada por la corrosión, motivo que provocó su demolición, sin que antes se hubiera advertido del riesgo de derrumbe y sin que se haya depurado ningún tipo de responsabilidad, la cubierta de la nueva piscina será de madera con grandes cristaleras en los paramentos laterales y una grada en uno de los lados, además de vestuarios, almacenes, cafetería y aparcamientos para 111 vehículos.

Cuatro millones de euros costará la nueva instalación acuática, de los que un 60 por ciento estará financiado por la Junta de Castilla y León y el 40 por ciento restante será asumido por el Ayuntamiento de Ávila.

Se espera que la adjudicación de las obras se produzca en el mes de julio y que den comienzo dos o tres meses después, con un plazo de ejecución de año y medio.