FÚTBOL – Los campos de tierra también tienen derecho a cuidados (y los equipos a rotación)

Las imágenes que acompañan a esta noticia corresponden al partido disputado en la mañana del sábado, correspondiente al grupo B de la Primera División Provincial Infantil, entre los equipos de la Casa Social C y el Colegios Diocesanos C. Como podrán observar el estado del terreno de juego del anexo 2 del Adolfo Suárez es un auténtico barrizal, consecuencia de las últimas nevadas.

En ese lodazal tuvieron que luchar por mantener unas mínimas condiciones futbolísticas en sus acciones los jugadores de ambos equipos, que semana a semana tienen que sufrir el mal estado del campo, nieve o no. Y es que los conjuntos que toman parte en el grupo B infantil están discriminados en relación con los demás que participan en las distintas categorías de los Campeonatos Regionales de Edad de fútbol en su fase provincial, quienes pueden disfrutar de practicar el balompié sobre el césped artificial de los campos de Sancti Spíritu o de la Zona Norte-El Seminario.

Quien designa los campos, la delegación provincial de la Federación de Castilla y León de Fútbol, una semana sí y otra también, siempre manda a los mismos equipos infantiles del grupo B a las ‘trincheras’ del anexo 2, estando ‘castigados’ a sufrir esta diferenciación negativa. Un hecho que produce el rechazo de los chavales de 12 y 13 años, que aunque son niños no son tontos, los cuales se consideran postergados en relación con el resto de jugadores del fútbol abulense.

Si por lo menos la superficie de tierra del anexo 2 del Adolfo Suárez estuviera mantenida debidamente… pero no, parece que nadie quiere asumir esa responsabilidad de cuidar el campo, que no olvidemos es una instalación municipal del Ayuntamiento de Ávila, quien debería de preocuparse de atender las infraestructuras deportivas que son de su titularidad, bien sea directamente o a través de la entidad que corresponda, como sería el organismo federativo que es el que organiza la competición.